Helena Ortega, la hija menor de la pareja que formaron Sebastián Ortega y Guillermina Valdés, cumplió 19 años y sigue su propio camino con un perfil siempre bajo. Se sabe poco de ella: que le gustan los tatuajes –desde los 15 años ya se hizo varios-, la buena comida, hacer skate, jugar al fútbol y tocar la batería.
A pesar de que sus padres siempre fueron muy mediáticos, la joven siempre prefirió el perfil bajo. Incluso en su cuenta de Instagram, donde tiene casi 55 mil seguidores, subió apenas nueve publicaciones y algunas historias que se fueron borrando.
Sebastián Ortega, Guillerimina Valdés y una gran familia
Sebastián Ortega y Guillermina Valdés se conocieron en 1998 y, a pesar de que están separados desde 2010, actualmente se siguen en las redes y se llevan bien. Su historia de amor duró trece años, durante los cuales llegaron sus hijos Dante, de 23 años, Paloma, de 21, y Helena, de 19.
Como parecían ser una pareja feliz, la noticia de su divorcio sorprendió al mundo del espectáculo local. Según contó en su momento Yanina Latorre, el motivo fue que Guillermina vivía muy encerrada con sus hijos en una casa de Pilar, mientras Ortega vivía en la Capital Federal y solamente iba algunos fines de semana a visitarla.
La familia de Guillermina Valdés se agrandó con la llega de Lorenzo, su último hijo de durante su relación de casi nueve años con Marcelo Tinelli, que era un gran amigo de Sebastián Ortega, que vivió la pareja como “una traición”. El pequeño Lolo, en parte por su vínculo con su papá, es el único hijo de Guillermina que suele aparecer en los medios.
Mientras los tres hermanos Ortega se mantienen siempre alejados de la televisión, sobre todo desde que su mamá se separó de Tinelli y el conductor empezó a salir con Milett Figueroa. Solamente cuando Cande Tinelli los acusó de poco agradecidos, Dante contestó que “no sabía qué debía agradecer”.
“Estamos criados de distintas maneras, nosotros tenemos otros valores. Somos muy educados y agradecidos, y no sentíamos lo mismo del otro lado. Había algo raro, porque mi padre les daba todo, pero no había agradecimiento del otro. Todos mis hermanos sentíamos lo mismo”, contó Cande sobre todo el clan Tinelli acerca de Dante, Paloma y Herrera Ortega.
Helena Ortega, cultora del perfil bajo
Se sabe poco de la hija menor de la pareja que formaban Ortega y Valdés, en gran parte gracias a los posteos en Instagram de su madre, que por supuesto está muy orgullosa de su hija. A Helena le gustan los tatuajes y la buena comida, hacer skate, jugar al fútbol, tocar la batería y jugar con sus mascotas y las de su familia.
Al igual que a su padre Sebastián Ortega, el guionista y director de televisión y cine que acaba de blanquear su romance con la joven actriz Valentina Zenere, a Helena le encantan los tatuajes. El primero, un Cupido a punto de lanzar su flecha, se lo realizó apenas cumplió 15 años. A medida que creció, se hizo más.
A los 19 años, Helena Ortega, la hija menor de Sebastián Ortega y Guillermina Valdés, sigue defendiendo cada día su perfil bajo, muy lejos de aquel verano en la playa de Punta del Este cuando le cortaba el pelo a “El Tirri”, el primo de Marcelo Tinelli.
