Hace varias horas, trascendió una denuncia contra el abogado Roberto Castillo, actual novio de Cinthia Fernández. En el documento, el letrado aparece acusado por delitos de estafa y amenazas, que habría ejercido contra su denunciante. La misma habría contratado sus servicios de representación a mediados de 2023, ya que se declaraba como víctima de violencia de género por parte de su expareja.
Dada la gravedad de los hechos expuestos, TN Show contactó con el letrado para conocer su versión. Tras leer la copia de la causa, Castillo aseguró que tomó conocimiento del supuesto caso por este medio y que desconoce tanto la situación por la cual se le acusa, como a la persona detrás de esta acusación.
“No encuentro sentido. Seguramente la escribieron rápido (la causa) y la metieron para filtrarla, eso para darle publicidad, pero no me preocupa porque no tiene ninguna clase de sustento. Por eso concluyo que debe estar prefabricada por algún profesional que quiera hacerse notar”, respondió, convencido, el profesional de las leyes.
Qué dice la presunta denuncia contra Roberto Castillo
De acuerdo a los detalles que reposan en el instrumento legal, en julio de 2023, Roberto Castillo accedió a representar a la demandante. Tras su acuerdo de palabra, ella habría realizado varios transferencias por concepto de honorarios profesionales de entre 3 mil y 3.500 dólares al cambio para la época, y le entregó un millón de pesos en efectivo.
Una vez se realizaron los respectivos abonos, semanas después, la cliente le hizo un reclamo al letrado porque su caso no avanzaba, lo que derivó en presuntas amenazas en su contra. La mujer también alegó que en las audiencias posteriores, no se sintió debidamente representada ni por Castillo, ni por otros dos colegas que envió en su lugar, de los cuales uno de ellos estaba inhabilitado para ejercer su defensa.
Ante su creciente disconformidad, uno de los abogados del buffet al que pertenece Roberto, la habría amenazado con complicar aún más su situación legal, utilizando en su contra toda la información que ella les facilitó y dar de baja sus servicios si continuaba con sus reclamos. Al parecer, esta situación complicó el proceso contra su expareja y se declaró en estado de vulnerabilidad.