La Justicia decidió mantener tras las rejas a Julio César Grassi, el sacerdote condenado en 2009 por abuso sexual infantil. Con 68 años, deberá cumplir su pena hasta 2028, luego de que el Tribunal en lo Criminal N° 1 de Morón rechazara su solicitud de libertad condicional.
Al respecto, el abogado Pablo Gallego, que representó a una de las víctimas en el juicio contra el cura, expresó: “Quedamos muy conformes con los breves fundamentos del tribunal. Nos provoca mucha satisfacción y la decisión es acorde a la legislación argentina sobre la Convención de los Derechos del Niño”.
Gallego también describió el comportamiento del acusado: “Toda la situación de Grassi en la audiencia fue bochornosa. Se plantó desde un lugar muy agresivo hacia los jueces y hacia el Servicio Penitenciario. Vimos en vivo a un monstruo”, afirmó en diálogo con TN.
El letrado anticipó la posibilidad de una apelación por parte de Grassi, aunque consideró que deberá esperar los fundamentos finales. “Para él, todos son tontos y se cree que es la víctima, que su palabra es la única que vale. Es muy vehemente”, sostuvo.
Como en cuatro años va a salir de la cárcel tras cumplir la condena, Gallego expresó: “Me preocupa que va a hacer la Argentina con este hombre cuando esté libre. Espero que la Iglesia haga algo al respecto y que a este monstruo lo excomulguen”.
Qué dijo en cura condenado por abuso en la audiencia
Grassi había reclamado su excarcelación bajo el argumento de que alcanzó más de dos tercios de la condena en prisión. En la previa a la audiencia de este jueves, Gallego había hecho hincapié en que el Código Penal excluía de ese beneficio procesal a quienes cometieron delitos contra la integridad sexual.
Pasadas las 11, el Tribunal en lo Criminal N°1 de Morón comenzó a analizar el pedido del cura. La jueza dispuso 15 minutos de exposición para las partes, y el primero en tomar la palabra fue Grassi. Sin embargo, dijo que se sorprendió por el poco tiempo que le dieron para fundamentar su pedido y solicitó un cuarto intermedio breve.
Al regresar, aseguró que es “inocente” y mencionó varios casos donde se condenaron a personas que no habían cometido ningún delito. “Muchas veces, un error judicial puede llevar a una persona inocente a la cárcel”, fue su argumento.
“Hay una continuidad en la vida de una persona, si durante todo el proceso y la condena me he comportado procesalmente como corresponde, será también en la externación que me comportaré como corresponde. Señores jueces, quédense tranquilos y denme las exigencias que me quieran dar”, amplió.
“Voy a hacer un nuevo proyecto de vida. Voy a ser útil a la sociedad, si la Iglesia me lo permite”, remarcó el condenado a través de una plataforma virtual. “Solicito la libertad condicional con las condiciones que me imponga el propio tribunal”, dijo en su última intervención.
Finalmente, los jueces Mariana Maldonado, Juan Carlos Uboldi y Claudio José Chaminade resolvieron por unanimidad “no hacer lugar a la nulidad del dictamen” solicitada por el imputado, y denegar la libertad condicional “con especial mirada y ponderación sobre los derechos del niño”. Los fundamentos del fallo se darán a conocer el 2 de septiembre.