A pesar de los esfuerzos del Gobierno por ratificar una y otra vez que no se acelerará la devaluación del tipo de cambio oficial, el dólar blue volvió a subir este viernes y alcanzó por primera vez a los $1500. La brecha rozó el 60%.
En la semana, la cotización paralela aumentó $80 y acumula un alza de $135 en lo que va de julio. “La mayoría está comprando, son pocas las ventas y vienen de gente que está desprendiéndose de los dólares para hacer algún pago”, comentaron a TN en una cueva.
Las razones detrás de la suba del dólar blue son múltiples y combinan factores estacionales con cuestiones macro todavía no resueltas. Los cinco principales factores que alientan la escalada pueden resumirse en las siguientes:
1. Dólar oficial atrasado
El tipo de cambio oficial se percibe como atrasado en el mercado, ya que hace seis meses que el Gobierno mantiene la devaluación mensual en 2%, muy por debajo de la inflación. El índice de tipo de cambio real -que compara el poder de compra del peso con frente a otras monedas- también muestra el rezago de la cotización oficial.
Esa situación aumenta las expectativas de devaluación del oficial y, con ellas, la demanda de dólares a este precio que se empieza a percibir como “barato”. Del lado de la oferta, los exportadores están tentados a retener sus productos a la espera de un tipo de cambio más conveniente. Pese a ello, el Gobierno ratifica -casi en forma diaria- que mantendrá el ritmo de devaluación y asegura que el dólar oficial no está atrasado.
2. Dudas sobre las reservas
Luego de cerrar junio con saldo negativo en el mercado cambiario, el Banco Central volvió a comprar divisas los primeros días de julio, a un ritmo que promedió los US$23 millones diarios. Además, las reservas sufrieron una baja considerable por pagos de deuda a bonistas y la semana que viene hay un nuevo giro al FMI. El propio Gobierno reconoció ante el organismo que espera una caída de US$3000 millones en las reservas para el tercer trimestre, que estacionalmente tiene menores liquidaciones del agro. Tampoco hay novedades sobre un nuevo acuerdo con el FMI que inyecte fondos frescos a las arcas del Central.
“En promedio de 2003 a la fecha, julio no es un mes deficitario, sino positivo para compras del mercado cambiario (US$200 millones de mediana) De continuar en esta media terminaría el mes con aproximadamente US$500 millones comprados, ya muy lejos de los meses de abril y mayo. Pero mejor que el pésimo junio. Sin embargo, se quedaría muy corto frente a los pagos de deuda en moneda extranjera y las reservas netas y brutas sufrirían en consecuencia”, indicó la consultora Outlier.
3. Tasas negativas en pesos
Si bien el Gobierno puso en marcha la segunda fase de su plan de estabilización y afirmó que se terminó la etapa de tasas negativas, todavía los rendimientos no repuntan como para convencer a los inversores de mantener sus posiciones en moneda local y a los exportadores de liquidar sus divisas en lugar de financiarse en pesos.
“De fondo, el nivel de tasas de interés podría no terminar de ser suficiente tanto para volver atractivos los instrumentos en pesos de corto plazo como para elevar el costo de apalancamiento de los exportadores (tasas activas). Si bien las tasas de interés del mercado de dinero vienen subiendo ante la expectativa de convalidación del BCRA una vez estrenado el nuevo esquema, el contado con liquidación podría estar indicando que la suba es homeopática o, dicho de otra manera, que falta tasa”, explicaron los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI) en relación con la suba del dólar financiero, que funciona como una referencia para el blue.
4. Vacaciones de invierno
El arranque de las vacaciones de invierno también suele ser un factor estacional que impulsa la cotización del dólar blue. Hasta hace pocos días, a aquellos que tenían planeado algún viaje al exterior les resultaba más barato comprar dólares en el mercado paralelo y pagar en efectivo que usar la tarjeta de crédito. Luego de la escalada del precio, esa cuenta ya no es tan clara porque los valores quedaron prácticamente empatados. El dólar tarjeta cuesta $1504 y el blue, $1500.
5. Aguinaldo
Los trabajadores en relación de dependencia terminaron de cobrar sus aguinaldos a fin de junio o los primeros días de julio y rápidamente recibieron el sueldo de ese mismo mes. Ese efecto le dio aire a las finanzas personales de algunos individuos que aprovechan a dolarizar cualquier excedente de pesos. La tendencia se exacerba cuando el tipo de cambio paralelo empieza a subir, ya que las personas tienden a comprar más cuanto más sube.