Dai Viloni, tal como se hace llamar en redes sociales, figura en su DNI como Daiana Fernández. Sin embargo, a la hora de mostrar públicamente su exitoso desempeño como fisicoculturista, decidió tomar un seudónimo que homenajea a su papá Norberto, a quien todos conocen como Vicente Viloni, por el personaje que se popularizó en el programa “100% Lucha”
En una entrevista con TN, Daiana compartió detalles íntimos de su vida, sus logros y los sacrificios que implica su estilo de vida. “Mi papá siempre fue un gran ejemplo para mí, me enseñó la importancia de tener una vida saludable y dedicarle tiempo al deporte”, comenzó la atleta de la categoría Wellness IFBBPRO, que además es dueña de un gimnasio en Villa Ballester.
Del bullying al fisicoculturismo: “Fui muy muy flaquita y no me sentía cómoda”
De adolescente, Daiana no se sentía cómoda con su cuerpo. “Fui muy flaquita, en la escuela sufrí bullying, eso me llevó a anotarme en un gimnasio y ponerme a trabajar para conseguir el cuerpo que quería”, recordó.
En ese proceso, Daiana descubrió su pasión por el fisiculturismo, encontrando en este deporte un camino para alcanzar la confianza y fortaleza que tanto quería: “Se me cruzó por la cabeza competir y una vez que lo probé, no hubo vuelta atrás”.
La brutal rutina de entrenamiento de Daiana Fernández
Daiana Fernández es campeona argentina, sudamericana absoluta y MR Olympia Amateu de fisiculturismo. Haber alcanzado todos esos logros no fue para nada sencillo: “Implica lograr una mejor versión todos los días”.
Por eso, su día comienza a las seis de la mañana y, en ayunas, hace 40 minutos de algún ejercicio de cardio, que puede ser una caminata al aire libre o en su máquina caminadora. Su jornada recién termina a las 00.
“Me someto a los entrenamientos más intensos y semana a semana intento romper mis propias marcas. Hago sentadillas con 240 kilos, prensa con 450 y hip thrust (empuje pélvico) con 260”, explicó.
Y, sobre su día a día, detalló: “Luego de una jornada en donde doy clases a mis alumnas presenciales en mi gimnasio, también trabajo de manera online con alumnas de todo el mundo y de lunes a sábados tengo mi sesión de entrenamiento que dura aproximadamente entre una hora y media a dos”.
Pero para poder realizar todo esto necesita comer seis veces al día, es decir, aproximadamente cada tres horas: “Le doy a mi cuerpo la comida que necesita para recuperarse y volverse más fuerte después de cada sesión de entrenamiento”.
Un estilo de vida sin vicios: la elección de Daiana Fernández para ser fisicoculturista
Daiana Fernández necesita descansar entre seis a ocho horas diarias. “Y, por supuesto, no consumo alcohol, cigarrillos ni nada que sea perjudicial para mi organismo. Este es un deporte que requiere de tu esfuerzo los siete días de la semana, los 365 días del año”, agregó.
Para la fisicoculturista, este estilo de vida no es un sacrificio: “Realmente me gusta lo que hago, me gusta sentirme bien y fuerte”.
Además, siento que esta disciplina a la que le dedica alma y vida le sirvió mucho con su autoestima. “Me ayudó con mi seguridad, ya que cuando comencé fue porque no me sentía a gusto con mi cuerpo”.
El riguroso plan alimenticio de Daiana Fernández y su “comida trampa”
Daiana es atleta desde hace diez años y, tras ser campeona absoluta sudamericana de fisicoculturismo, se ganó el carnet profesional. Para sostener ese status, lleva adelante un riguroso plan alimenticio que, cuando no está en competencia, le da un permitido semanal al que llama “comida trampa” que generalmente es “hamburguesa o sushi”.
“No consumo azúcar, harinas, industrializados, embutidos, procesados, grasas saturadas, tampoco alcohol ni lácteos. Mi alimentación se basa principalmente en fuentes proteicas de buena calidad, como por ejemplo el pollo, huevos y carne. También tengo mis fuentes de energía que son los hidratos de carbono y las grasas buenas, en donde principalmente utilizo el arroz, la avena, papa, frutas, vegetales, palta, semillas, oliva y pasta de maní”, explicó Daiana.
Cuando se encuentra en plena competencia, Daiana cuenta que puede estar “aproximadamente 20 semanas sin comer nada que esté fuera de su dieta”.
Afortunadamente, su pareja comparte su misma pasión y todo se vuelve más fácil. “En nuestra casa no vas a encontrar alimentos que no sean saludables. Siempre te vas a levantar con un desayuno preparado en el momento con los nutrientes que necesita tu cuerpo”, explicó.
“En los días en que estás cansada siempre vas a tener a alguien que te impulse a esforzarte por demás para poder lograr una mejor versión de vos mismo”, resaltó sobre ese apoyo crucial que tiene en su casa.
La fortaleza de Daiana Fernández ante el acoso callejero
“El acoso, lamentablemente, es algo que a todas en algún momento nos ha tocado pasar”, reflexionó Daiana. Sin embargo, encuentra consuelo en el hecho de que el gimnasio no solo fortaleció su físico, sino también su seguridad personal.
“No importa el cuerpo que tengas, siempre va a estar la gente que te haga sentir incómoda. A mí el gimnasio también me ayudo con mi seguridad y hoy en día, si hay algún tipo de rechazo, sinceramente no lo he sentido. Siempre fui más bien admirada por todo el sacrificio que mi cuerpo demuestra”.
El entrenamiento diario y la mejora en su autoestima hicieron que todo ese bullying del pasado sea solo un mal recuerdo. Hoy, cuando Daiana se mira a sí misma ve “una mujer fuerte, luchadora, que no se da por vencida hasta cumplir sus objetivos”.